AYNA
“La Suiza Manchega“, enclavada en plena Sierra del Segura en lo más profundo del río Mundo, es un pueblo ideal para amantes de la naturaleza y para relajarte y desconectar de todo.
Enclavado en la montaña hace que su acceso sea serpenteante y empinado, llegando en un primer momento a un mirador para contemplar las vistas y hacerte una foto con la moto y el sidecar que aparece en una de las películas más importantes del cineasta José Luis cuerda, “Amanece que no es poco“, un albaceteño que decidió hacer gran parte del rodaje en Ayna, ya que le sorprendió por sus espléndidos paisajes y la hospitalidad de sus gentes. Se ha creado una ruta cinéfila recordando los escenarios de esta película y es muy curioso descubrirlos y conocer más a fondo este film.
Para los que buscan historia y arquitectura es imprescindible visitar los restos visibles que quedan del castillo de la Yedra o la Cueva del Niño, donde encontramos las pinturas rupestres de Arte Levantino y del Paleolítico Superior más antiguas de Castilla La Mancha y declaradas Patrimonio de la Humanidad en 1998 por la UNESCO.